Sentimientos

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Hay palabras que pierden todo su significado al pronunciarlas, entonces qué, mejor no nombrarlas. Dejar que el vacío interprete su sonido inexistente y que los oidos escuchen un mensaje entre señales. Impedir que las letras formen sus fonemas y que nuestros labios para hablarlas se separen. Aislarlas de nuestro vocabulario y dejarlas presentes sólo en los ensayos.
Así cobrarían vida justamente, serían invocadas inconscientemente y tendría valor su significado pues, sin nombrarlas, nadie se expresaría en un lenguaje falso y sería verdadero lo manifestado...



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